Consejos para estudiar a distancia y no morir en el intento
Estudiar a distancia puede convertirte en el profesional que deseas ser, pero, al mismo tiempo, también te da la posibilidad de trabajar, ir al gimnasio, practicar tus hobbies favoritos, tener vida social, ocuparte del hogar, cuidar de tu mascota, tener tiempo para tu familia o, incluso, ver alguna que otra película o serie en alguna plataforma en streaming.
Esas son, precisamente, algunas ventajas de esta modalidad educativa, que es una alternativa a la formación presencial y que actualmente está en auge, puesto que cada año son más y más las personas que deciden estudiar cursos, másteres y expertos a distancia.
Sin embargo, estudiar a distancia no es fácil, ya que se necesita una mayor disciplina y no todo el mundo es capaz de ser constante y dedicarle todo el tiempo que realmente debería.
Principalmente, entre los principales problemas a los que se enfrentan los estudiantes se encuentra el de no encontrar motivación, desvíos de atención por todas partes y el no saber prepararse.
Por eso, si has elegido este tipo de formación y quieres conseguir finalizar tus estudios de la mejor forma posible, te presentamos algunos consejos prácticos y realistas que te vendrán de maravilla para estudiar a distancia y no morir en el intento.
1. Asegúrate de estudiar lo que realmente te gusta.
Hay personas que, desde una temprana edad, tienen clarísimo qué es lo que quieren estudiar y a qué se quieren dedicar profesionalmente. Sin embargo, también existe un porcentaje de la población que no tiene esa certeza y, en muchas ocasiones, eligen estudiar algo que, finalmente, no les gusta y eso conlleva al fracaso y la desmotivación.
Por eso, si eres de esas personas que todavía no lo tiene claro, es muy importante que te informes bien sobre las profesiones que más te llamen la atención y veas si realmente te gustaría dedicarte a ello.
No obstante, hay que tener en cuenta que, aunque te guste lo que estás estudiando, te encontrarás con aspectos que no te gusten tanto y, posiblemente, te cuesten más y llegues a decepcionarte. Los estudios a distancia suponen tener mucha disciplina, pero algo que ayuda mucho es el placer por lo que haces y estudias.
2. Descubre un método de estudio.
Las técnicas de estudio configuran una metodología guiada que te ayuda a aprender a estudiar a través de una serie de pautas y de técnicas concretas, como son la lectura, hacer resúmenes, esquemas o mapas conceptuales.
De hecho, a la hora de estudiar, es importante que realices esquemas con la materia más importante y, una vez tengas las ideas y los conceptos, hagas resúmenes.
Además, la lectura también es un aspecto fundamental, puesto que es el primer contacto que se tiene con el temario. Por eso, debe de hacerse tranquilamente y comprendiendo todo aquello que se lee, además de ir subrayando las ideas más destacadas. Ten en cuenta que el subrayado tiene que ser de los aspectos, frases o palabras más relevantes del texto.
Otra técnica de estudio son los mapas conceptuales, que también ayudan a comprender mejor el temario. En este tipo de mapas se pueden utilizar colores para diferenciar bien las ideas principales o la jerarquía de conceptos, así como utilizar formas geométricas, letras mayúsculas o minúsculas, flechas, etc.
3. Organiza tu tiempo.
Uno de los aspectos más importantes a la hora de estudiar a distancia es el tiempo y, para ello, hay que tener claro el tiempo que necesitas dedicarle al estudio. La educación online te permite compaginar el estudio con otras actividades, pero es importante que encuentres el equilibrio entre los distintos ámbitos de tu vida.
Así, tienes que planificarte y tener un horario, que se convierta en una rutina. Esto no es fácil, ya que, en algunas ocasiones, tendrás que renunciar a otras actividades, pero, a la larga, tendrá su recompensa.
Una de las mejores formas para organizar tu tiempo es a través del cronograma de estudio, donde puedes definir las actividades diarias más importantes, lo que vas a estudiar cada día y a qué horas.
También existen algunas técnicas que te ayudan a gestionar el tiempo, como la técnica Pomodoro, que consiste en dividir las tareas en partes de 25 o 30 minutos, con intervalos de 5 minutos de descanso.
4. Elige un lugar idóneo para estudiar.
Una vez establecido el horario, es esencial encontrar un lugar adecuado de estudio, en el que tengas el menor número posible de distracciones y en el que puedas concentrarte sin que nadie te moleste.
Este sitio tiene que reunir una serie de condiciones de iluminación, de silencio y, por supuesto, que esté equipado con mesa, silla y ordenador, aunque lo más importante es que te sientas cómodo en él.
Es cierto que a veces se prefiere el sofá o la cama, pero siempre es necesario tener un rincón adecuado con un ambiente de paz y tranquilidad.
5. Se sensato y conoce tus límites.
A pesar de que se empieza con muchas ganas, lo cierto es que los estudiantes a distancia no suelen dedicarle el 100% de su tiempo al estudio. Por eso, es importante ser realista y ser conscientes de cuánto tiempo realmente le vas a poder dedicar a tu formación.
Para ello, te puedes matricular solo en las asignaturas que veas viable aprobar. Tienes que tener en cuenta que un buen desempeño tiene relación directa con la dedicación solo hasta el punto que tus límites te lo permiten.
Estudiar a distancia no es como ir a clase, donde, sí o sí, tienes que estar pendiente de lo que te dice el profesor. En este tipo de educación es muy importante que conozcas tus fortalezas y límites para que tengas éxito.
6. Prioriza y no dejes nada importante para última hora.
Otro de los aspectos importantes es que identifiques las obligaciones y tareas más urgentes para realizarlas en primer lugar. Priorizar significa escoger, sobre todo cuando te planteas estudiar a distancia, pero eres tú el que decide qué tiene que priorizar.
Para priorizar correctamente debes de tener en cuenta muchos factores. Por ejemplo, llevas todo el día estudiando, tienes sobrecarga, cansancio y si sigues no vas a rendir bien. Aquí puedes priorizar tomarte un descanso y hacer otras actividades.
Además, dejar algo para última hora probablemente no va a rendir un buen resultado, puesto que acumulas el cansancio y estrés de todo el día. Por eso, intenta hacer actividades importantes poco a poco.
7. No dudes en preguntar.
La formación a distancia te da la ventaja de tener a tu disposición a una serie de tutores que atienden tus dudas de una forma personalizada. Además, la resolución de posibles dudas es esencial, puesto que te permite comprender mejor lo que estás estudiando y seguir avanzando.
Esto conlleva a la importancia de tener una relación fluida con los tutores, que brindan atención personalizada y permanente.
Y no solo tienes los tutores, sino que también puedes buscar a un especialista, consultar en foros, conversar con compañeros o buscar en Google. Ten en cuenta que toda duda es importante y buscar el conocimiento te ayudará a mejorar tus estudios.
8. Date pequeñas recompensas.
La constancia es una de las principales características que tiene que tener la persona para estudiar a distancia. Para ello, es importante que establezcas metas y objetivos y permitirte, en alguna que otra ocasión, pequeñas recompensas para celebrar que los cumples.
Ver una película, cocinar algo que te guste, salir a pasear, quedar con los amigos, descansar un día… Son muchas las recompensas que puedes darte, aunque tienes que tener claro que no se trata de renunciar a tu tiempo de descanso, sino de darte un regalo por el esfuerzo y desempeño que estás haciendo. Algo que también te ayudará a motivarte.
9. Aprovecha las nuevas tecnologías.
Los últimos avances en la tecnología ponen a tu alcance un sinfín de herramientas para que no te sientas nunca solo y para que puedas consultar tus dudas.
Herramientas como foros virtuales, Cursos Mooc, redes sociales, chats o videoconferencias te permiten estar en contacto directo con personas que están estudiando lo mismo que tú, o incluso profesores o especialistas que pueden ayudarte.
Así, estudiar a distancia no significa que estés solo, sino que es una forma colaborativa de aprender, compartiendo ideas y solventando dudas con tus compañeros y profesores.
10. Controla tu progreso.
Es importante no esperar al último día para hacer los trabajos o realizar las actividades. Es necesario un hábito de estudio que te permita cumplir con los objetivos y, para ello, es importante la organización y que valores tu aprendizaje de una forma permanente y continuada.
Uno de los recursos más asequibles para controlar tu progreso es a través de la realización de test o casos de estudio. También puedes investigar en internet.
11. Motívate y diviértete.
Como hemos dicho anteriormente, el estudio a distancia requiere constancia y, sobre todo, paciencia, pues algunos momentos son más difíciles que otros. Pero, cuando sientas que no puedes más, recuérdate que sí y piensa en por qué estás estudiando y qué es lo que quieres conseguir con ello.
La motivación es esencial en la formación online. Si divides tu meta en pequeños pasos, será más fácil ver resultados, medir los avances y, de esta forma, también motivarte. Algo que también se puede conseguir con las recompensas.
Escoge cosas nuevas siempre que sea necesario, no tengas miedo de equivocarte y aprende algo nuevo todos los días son algunos trucos para automotivarte cuando estés con el ánimo bajo.